El portavoz del Grupo Parlamentario Socialista, Iñaki Lavandera, expresó hoy su satisfacción por la aprobación, en comisión de Sanidad, de la iniciativa por la que se pide una regulación responsable del uso del cannabis. La propuesta salió adelante con el apoyo de todos los grupos excepto el PP, que se opone a pedir al Estado avances en la materia y a que esa regulación, en tanto no exista, sea establecida por los clubes y asociaciones en colaboración con la administración.
Mediante esta proposición no de ley, se pide al Gobierno de España y a las Cortes Generales a promover avances sólidos, tanto en la regulación como en una interpretación jurídica consistente, que permitan progresar de un modo decidido, como están haciendo otros países, por la senda de regular el consumo de cannabis, siempre desde la perspectiva de que se trata de un producto que conlleva riesgos para la salud.
Asimismo, se insta al Gobierno de Canarias a presentar en la Comisión de Sanidad un informe de evaluación de las políticas de prevención, diagnóstico precoz, tratamiento y rehabilitación de las adicciones en Canarias, con especificidad de las relacionadas con el cannabis. por último, se le pide que presente en la Cámara un estudio y regulación del uso medicinal de los cannabinoides de origen natural, en aras a favorecer los efectos terapéuticos que sobre la salud de nuestros ciudadanos poseen.
En su intervención, Lavandera valoró la capacidad de consenso demostrada por la amplia mayoría de grupos parlamentarios y explicó que se trata de “una iniciativa muy completa que toca tres vertientes: salud pública, en el sentido de no perder de vista los riesgos que entraña y de ahí la petición a la Consejería de un estudio de la realidad del cannabis, la demanda a los clubes de esa regulación responsable y no estigmatizar el uso de una sustancia muy extendida, porque el prohibicionismo no ayuda a disminuir los hábitos de consumo”.
Indicó que las propias asociaciones de pacientes de cáncer tienen graves dificultades para acceder a estos productos, labor que están asumiendo las asociaciones, que demandan una regulación responsable por el Estado para tener garantías jurídicas. “Hay cierta jurisprudencia pero existe un problema importante para los clubes cuando hablamos de autocultivo, así como inseguridad jurídica en lo que se refiere a su transporte”.