El Consejo de Ministros aprobó ayer el Real Decreto con los Planes de Ordenación del Espacio Marítimo (POEM), por el que se establecen cinco demarcaciones marinas en el conjunto del Estado, una de ellas la canaria, y en el que se marcan las zonas en las que se pueden realizar distintas actividades, entre ellas, el desarrollo de la energía eólica con la instalación de molinos marinos. Dos de las zonas establecidas para ello en Canarias se encuentran en Fuerteventura.
Juan Placeres, patrón mayor de la Cofradía de Pescadores de Morro Jable se ha declarado “totalmente en contra de que se instalen en las zonas de pesca y en las plataformas insulares” ya que esto “afecta a la pesca y al ecosistema marino y va a romper una forma de vida tradicional única”.
Uno de los espacios establecidos en el POEM está en La Entallada, al este de Gran Tarajal, una parte cercana al faro, y esta “es la zona en la que pescan todos los barcos de la isla, los barcos de la Cofradía de Gran Tarajal, los barcos de Morro Jable, de Corralejo, los que pescamos el atún todo el año”, explica Placeres, en definitiva, asegura que se trata de “una zona de pesca importante”.
Insiste el patrón mayor en que instalar ahí un parque eólico “supondría romper el ecosistema y acabar con la forma de vida de muchas familias tanto directa como indirectamente”.
Los pescadores muestran su clara oposición ya que, además, “no se ha contado con las cofradías en ningún caso” en Fuerteventura. Califican de “gravísimo que se ponga una medida de este tipo por decreto” y saben que el establecimiento de esta zona no quiere decir que se vaya a instalar el parque ahí “pero seguramente sí se pondrá porque está en una zona muy adecuada para eso y está muy cercana a la central eléctrica”. “Nos tememos lo peor, pero vamos a hacer lo posible para que esto no suceda”, trasladan.
Defienden que “hay otras zonas y otras alternativas”, que “el fin no justifica los medios”, “no puede ser que te cargues un ecosistema y una forma de vida para producir energía limpia”, “limpia entre comillas” afirma, “porque los parques eólicos contaminan acústica y electromagnéticamente, además del daño que hacen en sus anclajes al fondo de una manera u otra”, concluye Placeres.
