Los atrangantamientos son una de las emergencias más habituales durante las fiestas navideñas es por eso que el SUC recuerda cómo actuar ante esta situación. En estas situaciones normalmente, la persona afectada tiene dificultad para respirar, no puede hablar y se comunica gesticulando para pedir ayuda. En ese momento es
importante mantener la calma y animar al afectado a que tosa con fuerza para intentar
acabar con la obstrucción de la vía aérea. Además es importante evitar que la persona que sufre el atragantamiento beba o coma porque puede empeorar gravemente la situación.
En esos casos, el Servicio de Urgencias Canario (SUC), dependiente de la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, insiste en que una actuación rápida y efectiva puede evitar que una situación que se produce con frecuencia pueda generar una emergencia vital.
Ante la llegada de las celebraciones navideñas, época de reuniones y comidas de empresas y amigos y numerosas cenas familiares, el SUC recuerda tres sencillos pasos que pueden ayudar al atragantado hasta la llegada del personal sanitario. En caso de no saber cómo actuar, durante la llamada al servicio de urgencias un médico del SUC podrá dar indicaciones mediante teleasistencia para que el afectado sea atendido correctamente.
Tres sencillos pasos
En primer lugar, si a pesar de toser con fuerza repetidamente el afectado no logra recuperar el aliento, se debe alertar de inmediato al 1-1-2 para solicitar asistencia.
Si el caso de atragantamiento persiste, el segundo paso es dar cinco palmadas con el talón de la mano en la espalda. Para ello debemos situarnos a un lado y ligeramente por detrás del afectado, sostener su tórax con una mano e inclinarlo hacia delante para darle cinco golpes en la espalda, entre los omóplatos comprobando después de cada golpe si el cuerpo extraño ha sido expulsado para no continuar realizando esta maniobra innecesariamente.
A continuación, si no se ha resuelto la situación pondremos en práctica la maniobra
de Heimlich. La persona que ofrece ayuda debe colocarse detrás del afectado y abrazarlo situando el puño de una mano con el pulgar hacia fuera en el punto medio entre el ombligo y la boca del estómago, poniendo encima la otra mano.
Deberá entonces inclinar al afectado hacia delante y realizar cinco compresiones hacia dentro y hacia arriba, con la fuerza suficiente para levantarlo del suelo -salvo que se trate de un niño, que no se deben levantar-, hasta conseguir la desobstrucción. Si tras practicar estas dos maniobras, golpes en la espalda y maniobra de Heimlich, no conseguimos que el afectado supere el atragantamiento, debemos continuar alternándolas -5 golpes en la espalda y 5 compresiones abdominales- hasta la desobstrucción o hasta que el afectado caiga inconsciente.
Es importante intervenir a tiempo en este tipo de emergencias, solicitar ayuda y seguir siempre las recomendaciones del SUC para evitar que el intervenido sufra una parada cardiorrespiratoria.
Además, el SUC persigue aumentar la protección de los más pequeños de la casa en estas fechas. En este sentido, hay que evitar que se lesionen no utilizando, por ejemplo, adornos de pequeño tamaño o desmontables que los menores puedan llevarse a la boca.
