
Un veterano biólogo especialista en ecología urbana, Carlos Suarez, considera que el proyecto de movilidad debería integrar los árboles y solo trasplantar algunos puntualmente.
Podcast Del Jable al Malpey.- 2025.02.25.
En la entrada del programa escuchamos al grupo Tremenda Jauría, la canción “Mucho miedo y más valor”.Una canción compuesta para Ecologistas en Acción donde se pide… que no cambie el clima que cambie el sistema, porque no hay Planeta B.
. – Presenta: Marusa Hernández y Sofia Menéndez
El primer tema es la bella protesta que han hecho algunos vecinos dando nombre a los sesenta árboles de la avenida de los Lagos de El Cotillo, Laura, Juan, Diego…etc, porque el Ayuntamiento de La Oliva los quiere arrancar con un proyecto de casi 700.000 € de Fondos de la Unión Europea, NextGenerationEU para acceso a la movilidad.
De un plumazo quitan la única zona verde que hay en El Cotillo, algunas ciudadanas consideran que se deben quitar algunos puntualmente que molestan en la puerta de la casa, pero no todos. Estos ficus tienen más de 20 años y si hubiera un Catálogo de los árboles de La Oliva serían clasificados de singulares. En su día los plantó la exalcaldesa Claudina Morales mediante otra financiación de similar cuantía.
Preguntamos a un experto Carlos Suarez, biólogo, recién jubilado, autor del libro Crónicas urbanas de la historia natural, así como el primer Catálogo de árboles singulares y conjuntos arbóreos de Las Palmas de Gran Canaria, considera que no hay justificación para quitarlos y no es consecuente con el aumento de la conciencia ambiental y la necesidad de verde de los ciudadanos. Se trata de ficus una especie que aguanta bien la maresía de El Cotillo y que deberían haberse integrado en el proyecto.
Son seres vivos que ayudan a reducir el CO 2 y que, aunque mucha gente no sea consciente de ello y los quieran erradicar, suponen bienestar y vida para el pueblo. Cada niña o niño debe tener que cuidar un árbol y estar ligado a él por vida, jugar, subirse y mantener esa interacción como algo importante de su herencia.
En el final del programa escuchamos la canción que compuso Stevie Wonder en 1979 La vida secreta de las plantas, un álbum que forma parte de la banda sonora del documental del mimo nombre que gira en torno a la teoría de que las plantas sienten y tienen conciencia sobre su entorno.