La Guardia Civil denunció el pasado día 13 de marzo a un establecimiento de hostelería e incautó 24,5 kg de pescado inmaduro de la especie Longorón. El género se encontraba guardado en el almacén, concretamente en el interior de un frigorífico con un total de 5 bandejas, además no cumplía la talla mínima de referencia a efectos de conservación, hechos ocurridos en Las Palmas.
Los agentes en el ejercicio de sus funciones específicas en prevenir y perseguir el contrabando, fraudes y demás ilícitos de carácter fiscal en todo el territorio nacional y con motivo de la O.S OPSON XII establecieron los principios y requisitos generales de la seguridad alimentaria.
Asimismo, tras ser pesada y certificar que la totalidad de los ejemplares interceptados no cumplían con la talla mínima de referencia a efectos de conservación ( 9 cm de acuerdo con el Reglamento Europeo 1241/2019 sobre la conservación de los recursos pesqueros), estas capturas fueron decomisadas y entregadas en lugares habilitados según la normativa vigente, siendo la especie Engraulis Encrasicolus, Longorón.
La Ley 3/2001 de Pesca Marítima del Estado, así como la normativa europea y la autonómica Canaria, no permiten la captura, tenencia y desembarque de pescado por debajo de la talla mínima de referencia a efectos de conservación.
Pesca furtiva
Además del decomiso de las capturas, la Guardia Civil, pudo confirmar que el pescado intervenido había sido comercializado por pescadores furtivos y capturados en el interior del Puerto de Las Palmas.
Por todo ello, se procedió a remitir la correspondiente infracción de los hechos descritos a la Consejería de Pesca del Gobierno de Canarias.
