La @Maestra de la Biodiversidad acaba de presentar una canción “Biodiversidad Canaria” sobre los símbolos de la naturaleza de Canarias, entrevistamos a su autora @Aceysele Chacón Méndez. Con motivo del Día Mundial de las Abejas, charlamos con el profesor de la Universidad de La Laguna, Carlos Ruiz, una eminencia en abejas solitarias.
Del Jable al Malpey.- inicia el programa escuchando la canción de la Biodiversidad canaria que Aceysele Chacón ha compuesto para la Maestra de Biodiversidad. El pasado sábado fue el Día Mundial de la Biodiversidad.
Se han cumplido 30 años de la creación de los símbolos de la naturaleza canaria, evento que ha pasado desapercibido, pero que esta artista recoge en esta canción.
Nos comenta la cantante majorera que hizo “un son porque podía narrar la biodiversidad de todas las islas y así aprender cosas que no sabía. Desconocemos muchas especies de las islas vecinas. Esta canción es una forma muy didáctica para aprender, tal vez suene a infantil, pero por eso me gusta. Es una forma de apreciar lo diversos y ricos que somos. Necesitamos más conciencia y necesitamos información para relacionarnos con nuestro entorno”.
Continuamos hablando de biodiversidad con Carlos Ruiz, profesor de la Universidad de La Laguna, experto en abejas. El viernes pasado fue también el día de las abejas.
Nos habla de las abejas solitarias, tal vez las menos conocidas. “Canarias cuenta con una gran diversidad de abejas y la mayoría son solitarias es decir no generan enjambres o colmenas. De las 20.000 especies de abejas en el mundo sólo un 10% son sociales como las abejas de la miel. En Canarias pasa lo mismo”.
“Cuando uno se imagina un lugar idílico para las abejas visualiza un prado verde de montaña repleto de flores de todos los colores, con abejas zumbando atareadas de aquí para allá. Sin embargo, la naturaleza es caprichosa y muchas veces las cosas no son como nos las imaginamos. En el mundo real, por el contrario, basta con ver un mapa de distribución global de la diversidad de abejas para comprobar que las zonas con mayor diversidad se corresponden con lugares desérticos o semi desérticos con floración escasa y esporádica. Entre estas zonas destaca la cuenca mediterránea, -tanto del sur de Europa como del norte de África- o las zonas desérticas del suroeste norteamericano. Estas regiones albergan una diversa fauna de abejas solitarias con altos niveles de endemismo. Estas abejas del desierto han desarrollado adaptaciones increíbles para sobrevivir en estos difíciles e imprevisibles hábitats, como los cortos periodos de vida como adulto (de unas pocas semanas) sincronizados de forma precisa con la efímera ventana de floración de sus plantas hospedadoras, o los altos niveles de especialización con las plantas de las que se alimentan. Por el contrario, las abejas sociales dominan en zonas húmedas como los trópicos, donde la floración, al ser más abundante y constante a lo largo del año, les permite mantener sus pobladas colonias”, añade el profesor.
Habla de la diversidad de abejas de Fuerteventura y Lanzarote, la relevancia de especies endémicas y exclusivas de estas islas. El dato más notable es que 17 de los 30 endemismos canarios presentes en estas islas, son exclusivos de ellas y muchas de estas especies fueron recién descubiertas a finales del siglo pasado. “Entre estas, -añade Ruiz-, destacan algunas especies del género Anthophora como A. porphyrea o A. purpuraria presentes en ambas islas o algunas especies del género Andrena como A. hillana, A. damara y A. notata. Otros ejemplos son los megaquílidos Megachile hohmanni y M. binominata, la abeja cuco Dioxys lanzarotensis o la abeja solitaria Eucera (Tetralonia) lanzarotensis de Lanzarote”.
Asociamos a las abejas a la vegetación pero como antes indicó Ruiz, eso no es así “en Canarias las tenemos en zonas costeras secas. Es donde tenemos más diversidad de especies. Las islas orientales son un paraíso para estas abejas”.
“En las regiones del mediterráneo también se dan en zonas secas el mayor número de especies. En Fuerteventura destacan por ser singulares, aparecen aquí no en otras islas”.
Para este profesor a pesar de los distintos muestreos que se hacen para saber de las poblaciones, falta mucho por descubrir, sobre todo de las abejas en Canarias y en particular de Fuerteventura y Lanzarote”.
Para este especialista la diferencia entre las abejas silvestres y las de la miel es que las primeras están más amenazadas. “La abeja negra canaria domestica es la gran conocida, pero nadie conoce las otras. Las especies que están amenazadas son las silvestres que no son manejadas por los hombres. De ellas dependen gran parte de la polinización de nuestras especies silvestres. Su pérdida puede ser grave, ya que se podría dar una crisis alimentaria. “Un tercio de nuestros alimentos depende de la polinización, las abejas son fundamentales, junto con otros polarizadores, así que son fundamentales para la alimentación humana”.
AGRICULTURA INTESIVA
El mundo científico está poniendo en evidencia que están disminuyendo la población de estos animales tan útiles. “Sabemos que las abejas se enfrentan a un declive generalizado a nivel mundial. El 37% está en declive”.
Para este especialista “los problemas son varios: cambios en el suelo, la agricultura intensiva, los pesticidas, el transporte de mercancías. En la isla son muy sensibles a las especies invasoras. Por supuesto el cambio climático. Son una multitud de factores”.
Para que sepamos más de las abejas canarias Ruiz ha creado el blog Abejas Canarias. “También estamos haciendo campaña de ciencia ciudadana entre la gente para que nos ayude en la catalogación, mediante su observación y con las fotos que nos envían. Y de paso aprender a cuidarlas. “Se pueden hacer muchas cosas: no quitar los márgenes de los cultivos, plantar flores endémicas de las islas, no eliminar las llamadas malas hierbas, colocar caja nidos, eliminar pesticidas, los huertos urbanos ayudan”.
Nos comenta también que el 10% de la población de abejas en Canarias son especies exóticas introducidas. “Detectamos cada vez un número mayor. Esto puede suponer un peligro para las endémicas. Las abejas son insectos voladores y también pueden entrar con el transporte, por ejemplo de la madera”.
