Comisiones Obreras Servicios Canarias traslada, a través de un comunicado, que no entiende que la codicia de algunos empresarios los invite a seguir dándole vueltas a la negociación con el único objetivo de no incrementar los salarios. Aseguran que, desde la Negociación Colectiva, no pueden permitir que nuevamente sea la clase trabajadora quien sufra el mayor recorte.
Asumen que vivimos un mal momento para la economía, pero vivimos un peor momento sanitario que no ha impedido que los dos sectores que más trabajadores y trabajadoras tienen en Canarias, hayan tenido un 2021 con una buena recuperación y que ésta no se vea reflejada en los incrementos salariales, indican.
Declaran que durante el año pasado se demostró que Canarias sin el sector turístico no camina y que es imprescindible para que nuestra sociedad actual pueda sobrevivir. Además, denuncian el incremento de la luz y del combustible desde hace meses, que comenzaremos el año con un IPC por encima del 5% y el poder adquisitivo de más de 100000 personas trabajadoras en la provincia de Las Palmas se traducirá en un impacto inasumible para las ya mermadas economías domésticas.
Por otra parte, sostienen que las ayudas públicas a las empresas han sido importantes, sin contar con los fondos Sociales Europeos que favorecerán a su recuperación. Sin embargo, CCOO traslada que “hoy más que nunca no podemos renunciar a las subidas salariales” porque muchos trabajadores y trabajadoras de estos dos sectores, se han enfrentado a la crisis sanitaria, sin dejar de trabajar. Ponen el foco en los los supermercados, que no han visto paralizada su actividad en ningún momento; el esfuerzo de la clase trabajadora de la hostelería, con plantillas totalmente desbordadas en muchos casos; o el sector de comercio textil, en el que, señalan, reinan los contratos parciales, inmensamente feminizados, con muy pocas herramientas para conciliar la vida laboral y la personal.
Es por eso que hoy, 22 de diciembre, desde la federación de Servicios Canarias de CC.OO. informan de que comenzará un año de necesaria unidad de la clase trabajadora y de la propia sociedad canaria que no solo puede sobrevivir trabajando, sino que necesita volver a vivir con salarios que dignifiquen nuestras profesiones, nuestros sectores y sobre todo la afluencia del turismo tan importante en las islas.
