El 17 de julio de 2020, Bangaly Conde llegó a Fuerteventura después de haber sido rescatado por el Salvamento Marítimo Mizar junto con otros 60 compañeros y compañeras, entre los que se contó un bebé, cuando estaban embarcados en una patera en medio del mar a 35 millas de las costas de Fuerteventura.
Bangaly Conde viene de Beyla, un lugar en el interior de Guinea, muy alejado de las vistosas costas de Conakry, capital del país, donde las calles son de tierra y la naturaleza se mezcla entre las casas de la gente. A sus apenas 24 años, el joven decide dejar su lugar de nacimiento y recorrer más de 3.100 kilómetros para embarcarse en una patera rumbo a Europa.
Por desgracia, su luz se apaga en el mar el ocho de agosto de 2020 en la zona de Los Corralitos (Grandes Playas de Corralejo) a las 12:55, cuando el Servicio de Urgencias de Canarias recibe un aviso. Según el testimonio del personal sanitario que estuvo presente, a Bangaly Conde le habían visto entrar al agua, pero no salir de él, por lo que llaman al Centro de Emergencias. Acto seguido se comenzó con su búsqueda por tierra, mar y aire. Sin embargo, lo encuentra un motorista acuático en el mar, ya fallecido y en parada cardiorrespiratoria. Aunque lo llevan a la costa para intentar salvarle la vida, las maniobras de rescate no logran cambiar nada. Bangaly Conde muere en las costas del mar de Fuerteventura a los 24 años.
Conde deja para siempre a un hermano gemelo que reside en Alemania con el que esperaba reencontrarse, además de muchos amigos que le quieren mucho y que están muy tristes por su pérdida. Ellos siempre le recordarán como un chico al que le encantaba tanto el fútbol, que se pasaba el día en la cancha jugando a este deporte.
Misión Cristiana Moderna, lugar donde Bangaly Conde residía aquí en Fuerteventura, ha organizado una misa en su honor este domingo nueve de agosto, a las 17 horas.
DEP
