Podemos ha manifestado que existen muchas dudas sobre la validez de esta moción debido a la existencia de otra previa hace un año firmada prácticamente por los mismos concejales. Además señalan que los propios censurantes insistieron en la validez de ese primer intento, llevando a cabo una surrealista votación en pleno e incluso posteriormente exigiendo en los tribunales la validez de la toma de posesión de Claudina Morales como alcaldesa. El partido asambleario critica que ahora CC, PPM y NC nieguen sus propias actuaciones, en contra de la doctrina de autos propios, justificando aquel asalto al poder fallido de 2016 como un ensayo.
La formación morada basa su denuncia de la ilegalidad de esta segunda moción en un informe de la Junta Electoral Central, con fecha 10 de mayo, en el que se hace una aclaración del artículo 197.1.a de la LOREG, disponiendo : ”para la admisión a trámite de la moción de censura planteada contra un alcalde, en el caso de que alguno de los proponentes de la moción formara o haya formado parte del grupo político municipal del Alcalde, para el cómputo de la mayoría absoluta resulta de aplicación una mayoría reforzada” – y prosigue- “Así debería incrementarse esa mayoría en el mismo número de concejales que se encuentren en tales circunstancias.” En este caso, los 4 concejales del PPM pertenecieron al mismo grupo político municipal que el alcalde censurado y por tanto necesitarían incrementar en ese mismo número los apoyos a esta moción.
“Las prisas por volver a ostentar el bastón de mando del Ayuntamiento parecen una huída hacia delante de unas formaciones plagadas de casos abiertos con la justicia cuyo único nexo común es el tapar antigüas vergüenzas y recuperar su política clientelar”- declaran los portavoces de Podemos Fuerteventura.
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