La Asociación Entre Mares envía el siguiente comunicado:
“Desde la Asociación Socio-Cultural Entre Mares queremos expresar nuestro inmenso dolor y solidaridad con la familia de Nabody, la niña de dos años de edad que permanecía en la unidad de medicina intensiva del hospital Materno Infantil de Las Palmas de Gran Canaria en estado crítico tras recuperarse de una parada cardiorrespiratoria al llegar al puerto de Arguineguin y que ha fallecido en la tarde de ayer domingo.
Entre Mares quiere mostrar su más profunda tristeza y consternación por el fallecimiento de esta pequeña que viajaba con su madre hacía una vida digna y con la esperanza de un futuro mejor.
Es una vergüenza para nuestra sociedad y para quienes nos representan que justamente en el día Internacional contra el Racismo y la Xenofobia, se muera la pequeña Nabody, víctima inocente, de ese racismo secular que viene padeciendo el continente vecino.
No vamos a permanecer en silencio ante las muertes de seres humanos, que buscan una vida más prospera, justa, segura, digna. Y que apuestan su vida y las de sus hijas e hijos para poder alcanzar un futuro mejor para sus familias.
Nuevamente volvemos a escuchar condolencias institucionales, lamentaciones de políticos que día a día en sus reuniones para proteger las fronteras, toman medidas para blindarlas; para criminalizar a las personas que osan franquearlas; para externalizarlas en países donde los derechos de las personas valen menos que sus vidas.
Tragedias como la muerte de la niña Nabody de apenas dos años de edad, ponen en evidencia la deshumanización de la política, la hipocresía disfrazada de buenas intenciones que lejos de la actuación y la ayuda en los países de origen, el establecimiento de planes de desarrollo y de cooperación sigue financiando el blindaje de las fronteras a través del control policial.
No hemos de llevarnos a engaño, todas las muertes en las costas canarias y mediterráneas son evitables. Y cualquier discurso político que lo refute, evidencia la falta de voluntad, solidaridad y justicia social con las personas más vulnerables.
A los retos que nos plantean las migraciones no les podemos seguir dando respuestas de urgencia no planificadas, de corte policial y de control de fronteras. La Unión Europea, tiene el deber de garantizar medidas que regulen: el acceso a los servicios básicos (sanidad, educación, vivienda etc.), la acogida digna de las personas inmigrantes y refugiadas, su participación democrática y su integración social.
No vamos a permanecer en silencio ante lo inhumano de la muerte de esta pequeña, ni ante los abusos extremos de los derechos humanos de estos viajes hacia la muerte; ni ante la indignidad en la que viven retenidos en las diferentes islas después de haber llegado escapando de la muerte.
Exigimos a la Unión Europea, al Estado Español, al Ejecutivo Canario, el cambio que permita que los países más devastados por las guerras, las hambrunas, la desigualdad socio-económica se acerquen a la sociedad del bienestar y se acabe con el drama de miles de personas refugiadas e inmigrantes que día a día se juegan su vida y como ayer por la tarde tienen que sufrir la irreparable pérdida sus hijas e hijos
Desde “Entre Mares” hacemos un llamamiento a la responsabilidad de todos los partidos políticos y de la sociedad civil para que no agite falsos fantasmas xenófobos y populistas y habilite marcos de convivencia dignos y en igualdad, respetando el estado social y democrático de derecho que la Constitución española reconoce.
Estamos hoy aquí, de nuevo para denunciar esa injustica, esa sin razón y esa indigna acogida.”