El decreto ley de cambio climático del Gobierno de Canarias y su repercusión en Fuerteventura ha sido uno de los temas tratados con Mario Cabrera, Jana González y Natalia Évora del Grupo Nacionalista Canario, en el espacio parlamentario de Radio Sintonía.
El decreto ley se aprobó debido a los plazos impuestos por el ministerio, sin embargo, según han explicado los diputados, se introducirán todos los cambios en los que el Cabildo de Fuerteventura ya esta trabajando.
“Las administraciones locales son las que realmente conocen la problemática del territorio, el Gobierno no se puede olvidar de esa parte, especialmente en Transición, porque hay mucha normativa que afecta al territorio en esta isla. Porque no es lo mismo Fuerteventura que el resto de las islas y cualquier instalación eléctrica tiene un impacto distinto”, expone Évora. Lo que es seguro es que Gobierno de Canarias y Cabildo de Fuerteventura están condenados a entenderse.
Por su parte, Mario Cabrera habla de “las propuestas para el cambio energético que nos van a hipotecar el futuro” y asegura que CC está de acuerdo con las renovables, pero no a cualquier coste. Se defiende ante el calificativo de “los del todo prohibido” y declara que “en Fuerteventura sí queremos desarrollo, pero queremos marcarlo nosotros, no que venga nadie a imponernos, ni desde un Gobierno, ni desde una empresa”. “Sí a las renovables pero no donde quieran y no a costa de suelo rústico. No se puede planificar desde la distancia y desde el desconocimiento”.
Desmiente un problema de cero energético en Fuerteventura y recuerda la declaración de Interés General de la línea 132 por parte del pacto de las flores, “a partir de ahí están creciendo debajo de las líneas los parques solares como hongos, porque les queda cerca para instalar su planta de transformación
También preguntamos a los diputados sobre otra de las preocupaciones de la ciudadanía majorera, las investigaciones de tierras raras.
Mario Cabrera ha querido dejar claro que existe un compromiso, desde que el presidente canario anunciara la paralización. Una decisión que se habría ratificado en el Parlamento con el apoyo de todos los grupos políticos a excepción de de Vox. Explica que la hoja de ruta contempla no dar ninguna autorización más en este sentido, revisar para retrotraer las que se hubiesen podido dar, no actuar al margen o en contra de los gobiernos insulares y avanzar en desbloquear el tema del parque nacional de Zonas Áridas.
Un parque nacional que, según Évora, sería uno de los más importante de España en cuanto a zonas áridas, pero como se plantea en otros parques nacionales, tiene que ir de la mano de las administraciones, teniendo en cuenta los usos y actividades desarrolladas en la zona.