Durante años, los camellos han convivido con los majoreros sirviendo como animal de ganadería o de carga, incluso llegando a convertirse en un atractivo turístico de la isla. Según las predicciones de los científicos, este animal podría llegar a desempeñar un papel fundamental en la lucha contra el cambio climático y la desertificación, gracias a su capacidad para adaptarse a climas áridos.
Llegada del camello a Canarias
La historia del camello en Canarias se remonta al siglo XV cuando Juan de Bethencourt y más tarde Diego García de Herrera introdujeron este animal en el archipiélago al regresar de sus incursiones a la costas africanas en búsqueda de esclavos. Motivados por la capacidad de adaptabilidad a las zonas áridas de la isla, introdujeron los primeros camellos en Canarias.
Dos siglos más tarde, se confirma la capacidad de estos animales, tanto es así que en el siglo XVII, distintos autores reportan un censo en las islas de Fuerteventura y Lanzarote de entre 2.000 y 1.700 animales.
Papel fundamental en la economía y desarrollo de nuestra isla
A comienzo del siglo XX la agricultura de secano comienza a experimentar un desarrollo notable en las islas, por lo que el camello se convierte en un animal indispensable para esta actividad, convirtiéndosela así en un símbolo de estatus y prosperidad entre los agricultores.
Así mismo, el papel del camello no solo se limitó a la agricultura, su uso como animal de carga fue esencial para trasladar piedras y arena, necesarias para la construcción de terrazas en las laderas de la montaña, donde se cultivaba los granos y el cereal.
Con el paso del tiempo y los avances tecnológicos, la mecanización quito protagonismo a estos animales en la vida rural. No obstante, a partir de los años 40, el camello se incorpora en el ámbito turístico como un reclamo, de tal manera que se utilizaba para dar paseos a los turistas que visitaban las islas orientales del archipiélago, lo que ha hecho que se siga mantenido su crianza. A día de hoy, se trata de una actividad reglamentada, en la que cada camello tiene su propia licencia.
Reconocimiento y valor del Camello Canario
En la actualidad la comercialización de la leche de camella y productos derivados está en auge por sus propiedades, entre las que destaca su alto valor proteico, su fácil digestión, además de ser antioxidante, entre otros muchos. Son varios países los que han comenzado a elaborar distintos productos, no solo alimentarios sino también cosméticos elaborados a partir de la leche de camella.
La raza del Camello Canario está catalogada como autoctona del archipiélago y la única de toda Europa. En los últimos años asociaciones como la Asociación de Criadores del Camello Canario ha elaborado un Plan para la Conservación del Camello Canario, donde apuestan por el reconocimiento y protección de esta raza.
Fuente: Asociación de Criadores del Camello Canario (ACCC)
