Los productores del sector primario de Fuerteventura podrán vender próximamente su mercancía a través de un mercado virtual habilitado por el Cabildo que ayude a que la población conozca a los profesionales del sector, sus productos y puedan hacer sus pedidos sin moverse de casa.
Se trata de una de las siete medidas del plan de choque emprendido por la Consejería de Sector Primario y Soberanía Alimentaria del Cabildo de Fuerteventura para equilibrar la situación del sector durante la alerta provocada por el Covid-19, que ha provocado entre otras cosas la necesidad de clausurar temporalmente los mercados agrícolas y demás puestos habituales de venta.
Así, además de la puesta en marcha del mercado virtual, el Consejo de Gobierno insular ha aprobado esta semana la subvención del cien por cien del agua agrícola en determinados casos, instar al Gobierno de Canarias a que acelere el ingreso de los fondos provenientes del POSEI y otras ayudas, una campaña de fomento de la compra de producto local entre los responsables de compra pública, agilizar el pago de ayudas a asociaciones y colectivos profesionales con el objeto de garantizar la supervivencia del sector, realizar mejoras en el matadero y adquirir producto local por parte de la propia institución, entre otras medidas.
El Cabildo, “es consciente de que en la actual situación es muy complicado vender todo el producto por parte del profesional y que no todas las personas tienen las mismas posibilidades de adquirirlo”, explicó el consejero de Sector Primario y Soberanía Alimentaria, Marcelino Cerdeña, por lo que realizará una compra directa de productos para posteriormente distribuirlo entre las familias más vulnerables de la isla en coordinación con la Consejería de Asuntos Sociales y los ayuntamientos de la isla.
En materia de subvenciones, el Cabildo subvencionará el 100% del agua agrícola a los profesionales del sector que no reciban otras medidas de ayuda. Además, se gestionarán las subvenciones previstas para este año de forma inmediata.
Asimismo, desde la Consejería se están realizando todas las gestiones necesarias para apoyar al sector primario más allá del ámbito competencial, como la solicitud al Gobierno de Canarias del ingreso del POSEI y de otras ayudas, así como invitar a los responsables de compra pública en lugares como hospitales, centros de mayores, comedores sociales o comedores escolares, a que ahora más que nunca prioricen los productos locales, los de las pequeñas granjas y los agroecológicos, especialmente con los que han resultado más perjudicados por el cierre de la hostelería.
Respecto a la posible reapertura del Mercado de la Biosfera y otros mercados, el Cabildo mantiene el criterio de priorizar la seguridad sanitaria y continuará con su cierre temporal “hasta que sea totalmente seguro y no haya riesgo alguno para la población”, explicó el presidente insular, Blas Acosta, quien aclaró igualmente que la situación de seguridad sanitaria del mercado majorero y del mercado de San Cristóbal de La Laguna, que continúa abierto, “no son comparables”.
En ese sentido, el presidente insular aclaró sus palabras del pasado lunes, con las que “en ningún caso” quiso “ofender ni hacer innecesarias comparaciones” sino únicamente explicar que el Mercado de la Biosfera “no reúne las condiciones sanitarias en estos momentos, en una estación de guaguas de Puerto del Rosario, frente a un mercado regulado y con instalaciones en condiciones como el de La Laguna, no son comparables”.
Así, Acosta lamentó que en esta situación “formaciones políticas que no están a la altura utilicen torticeramente comparaciones con otros mercados para hacer afirmaciones sacadas de contexto, sin saber la pregunta hecha por los medios de comunicación”, declaró.
La alternativa inmediata, la creación de un mercado digital donde agricultores, ganaderos, la pequeña producción y transformación artesanal comercialicen de manera directa, sin intermediarios, alimentos frescos y saludables “ofrece algunas ventajas en la situación de alarma en la que nos encontramos”, detalló el presidente.
Entre otras, la “facilidad a la hora de recibir los alimentos en casa”, el hecho de que los productos no están expuestos al contacto directo de cientos de clientes, que “se trata de alimentos frescos, de gran calidad, necesarios e indispensables en estos momentos de confinamiento forzoso” y que, ayudando a la producción local, “se refuerza la autonomía alimentaria de Fuerteventura”.
